EN EL AUTOBÚS

LAS LEYES Y SUS TRAMPAS

 

Los legisladores hacen las leyes, marcos de referencia genéricos y posteriormente se desarrollan (o se debieran desarrollar) las distintas normativas que tratan de solventar las muchas lagunas o charcos específicos que no aparecen en esa ley marco y que son los que habitualmente pisamos y nos mojamos y si los vemos tratamos de rodearlos, para no empaparnos los pies al menos, que por esa baja parte del cuerpo empiezan muchos males de salud.

 

Y con los pies en el suelo y secos, cabeza fría y pies calientes, observamos como en el medio que nos rodea, el inmediato, quién hace la Ley hace la trampa y por ahí a los parias de la  tierra, la gran mayoría, nos cuelan todo y todo vale.

 

Hace unos años alguien dijo públicamente que no creía en la justicia y muchos tampoco creemos ni en la divina ni en la humana, esta última con mil argucias legales y “reales dineros” beneficia siempre al poderoso y aunque el camello no entre por el ojo de la aguja…!magia!, ellos lo consiguen.

 

Sálvenos el destino, Dios y las energías circulantes de caer en sus redes, en las de los que legislan con directrices políticas y económicas del momento y son capaces por ejemplo, de cambiar sistemas educativos cada temporada postelectoral.

 

Sin educación no hay cultura, ni pensamiento, ni opinión crítica  y tanto la educación, sanidad y servicios sociales para todos y sobretodo para los más desfavorecidos, son las bases, nunca recortables y siempre mejorables de una sociedad de bienestar  que si es posible.

 

Mientras nos duermen y aborregan, se siguen llenando los estadios de balompié y no las calles con los millones de personas afectadas por la desmejora de la calidad de vida de cada vez más ciudadanos, muchos ya  en la pobreza y miseria más absoluta.

 

No hay líderes actualmente creibles ni capaces de sacar a flote este barco a punto de hundirse. Es una pregunta, también una afirmación personal.

 

Yo creo que si los hay, observando, expectantes y a los que sólo falta dar el paso y luchar por el bien común y muchos volveremos a creer  en un futuro mejor y solidario para todos, el presente es inaguantable.