Alguna vez ya he comentado en este blog, la diferencia
entre dolor y sufrimiento.
Dolor: reacción aguda a una situación
Sufrimiento: dolor que no se soluciona y se cronifica.
(Lenguaje coloquial – licencia literaria #medaigual#que#medalomismo)
Y el dolor puede ser físico, agudo tratable
con medicamentos y/o tiene que ser tratado quirúrgicamente.
Y el dolor psíquico, algunos lo llaman
poéticamente del alma, ese creo que no pasa por quirófano.
Y pesares que inicialmente podrían ser curados
o mejorados en un espacio razonable de tiempo, pasan a convertirse en
padecimientos sin horizonte, sin esperanza, sin entender el rumbo que está
tomando nuestra “sanidad pública”.
Siento tanta impotencia que me impide razonar y no pensar más que en cómo se puede
cambiar y gestionar más eficazmente
TODO.
Las personas
no son “una espalda” que se pueden
quitar de la lista preferente (#estrategias veraniegas/listas de espera), son seres biopisosociales que sufren, también
en vacaciones.
#ESTOYMUYENFADADA
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| Para mi hija |
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